10.2.04

Hace una semana...

Esa mañana, la Medina respiraba más vida de la que yo recordaba. Estaba en continuo movimiento. Era el día antes de la pascua musulmana y los carneros balaban en todas las esquinas. El olor de las especias se mezclaba en el ambiente creando una fotografía difícil de plasmar. La luz entraba por las rendijas de los techos de paja. Las mujeres tapadas por sus velos hacían las últimas compras antes de la gran fiesta. Los pequeños restaurantes ofrecían sus mejores manjares a los hombres cansados de cargar con el peso de otros.

PD: He preparado un postre marroquí, a ver si os gusta. ;-)